Es un libro que mediante la analogía de dos padres, un padre rico y un padre pobre explica el cambio de mentalidad que se debe tener para triunfar en el mundo de los negocios. Padre Rico representa a las personas que hacen que el dinero trabaje para sí, y el Padre Pobre son las personas que trabajan por el dinero. A través de frecuentes comparaciones entre las diferentes formas de pensar de su padre rico y su padre pobre, Robert analiza los esquemas mentales que suelen mantener a una persona instruida en la pobreza, y que en cambio pueden llevar a una persona sin instrucción a la riqueza. Este libro se basa en la idea de que el sistema educativo debe ser cambiado puesto que las personas se gradúan sin base financiera; la diferencia entre una persona rica y una pobres es que las primeras enseñan a sus hijos acerca del dinero y las demás pasan años en las escuelas y al no tener base financiera solo aprenden a trabajar por el dinero, no les enseñan a tener el dinero trabajando para ellos. Por este motivo Robert propone un nuevo enfoque basado en que lo que debemos hacer es empezar por conocer el mundo de las finanzas, esto nos permitirá defendernos con nuestras propias herramientas y no caer en la trampa del crédito. Para comprender el verdadero significado de este nuevo enfoque es necesario utilizar la inteligencia como mejor herramienta para la supervivencia, plantear soluciones a los problemas que se nos presenten, utilizar la creatividad, esta nos permite darle forma a las soluciones propuestas y nos ayuda a diferenciarnos de los demás. La perseverancia es otra facultad que nos permite intentar una y otra vez hasta conseguir lo esperado. Cuando el autor dice que los ricos no trabajan para el dinero, este hace referencia a que con un conocimiento básico sobre las finanzas y aplicando las herramientas anteriores podemos empezar a ver el dinero como una forma de poder que permite alcanzar ciertas metas en la vida. Las personas de clase media y baja trabajan solo por el dinero, se vuelven esclavos de si mismos e ingresan a un círculo vicioso del cuál es muy difícil escapar, “la carrera de las ratas”. Una vez que ingresan a dicho círculo dejan de pensar y comienzan a guiarse por sus emociones, el miedo y la ansiedad, no les permite pensar y percatarse de la verdadera situación y de las posibles consecuencias. Para la mayoría las emociones moldean sus pensamientos, lo que este libro propone es utilizar esas emociones para su propio beneficio y darse cuenta del verdadero significado de las mismas. Hacer que el dinero trabaje para uno en vez de uno trabajar para el dinero, es una de las ideas clave de los primeros cuatro capítulos, esto nos permitirá llevar nuestras finanzas en vez que de las finanzas nos arrastren. No caer en la tentación del crédito, aunque es necesario saber que es una herramienta útil en algunos casos. Pensar-sentir-actuar sobre nuestras posibles soluciones nos proporcionará más rango de influencia sobre nuestras decisiones. La especialización financiera consiste en alimentar nuestros activos en vez de los pasivos. Pensar en las inversiones como generadores de ingreso a largo o a corto plazo y ver las obligaciones como desvíos de nuestros ingresos fuera de nuestro alcance. Tener una columna mayor de activos es una herramienta clave para poseer un futuro financiero estable. Ocuparse de su propio negocio y darse cuenta de las características del mismo nos permite conocer nuestras ventajas competitivas, y este es el primer paso para ver el dinero como consecuencia del dinero. Según el autor cada persona se debe hacer cargo de su propio negocio y ser parte o empleado de algún otro. La idea es que es necesario empezar a contar con inversiones en nuestra cartera, porque es de ahí donde de donde nace la verdadera riqueza. La riqueza se mide haciendo el ejemplo de dejar de trabajar hoy ver cual es el lapso de tiempo que pasará para tener la necesidad de empezar a trabajar de nuevo para satisfacer las obligaciones. Los impuestos nacieron para hacer que haya una distribución más equitativa del dinero, pero a lo largo del tiempo, término afectando más a los pobres que a los ricos. Los capitalistas dotados con conocimientos en leyes tributarias crean las corporaciones, con ellas logran minimizar la cantidad de dinero a pagar al gobierno. No basta con tener dinero hay que tener inteligencia financiera, esta está compuesta por cuatro amplias áreas: contabilidad, inversiones, compresión de los mercados y leyes, solo con esto se logrará conservar y multiplicar las riquezas. Existen cinco obstáculos por los cuales la gente no logra tener grandes ingresos: el miedo a perder dinero, superar el cinismo, la pereza , los malos hábitos y la arrogancia al superar estos obstáculos, se debe evaluar lo que funciona, buscar nuevas ideas, localizar ideas, organizar y tener una buena comunicación, para lograr un buen negocio. El dinero se debe invertir y utilizar razonablemente para que se puedan dar frutos certeros.
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Es un libro que mediante la analogía de dos padres, un padre rico y un padre pobre explica el cambio de mentalidad que se debe tener para triunfar en el mundo de los negocios. Padre Rico representa a las personas que hacen que el dinero trabaje para sí, y el Padre Pobre son las personas que trabajan por el dinero.
A través de frecuentes comparaciones entre las diferentes formas de pensar de su padre rico y su padre pobre, Robert analiza los esquemas mentales que suelen mantener a una persona instruida en la pobreza, y que en cambio pueden llevar a una persona sin instrucción a la riqueza.
Este libro se basa en la idea de que el sistema educativo debe ser cambiado puesto que las personas se gradúan sin base financiera; la diferencia entre una persona rica y una pobres es que las primeras enseñan a sus hijos acerca del dinero y las demás pasan años en las escuelas y al no tener base financiera solo aprenden a trabajar por el dinero, no les enseñan a tener el dinero trabajando para ellos. Por este motivo Robert propone un nuevo enfoque basado en que lo que debemos hacer es empezar por conocer el mundo de las finanzas, esto nos permitirá defendernos con nuestras propias herramientas y no caer en la trampa del crédito. Para comprender el verdadero significado de este nuevo enfoque es necesario utilizar la inteligencia como mejor herramienta para la supervivencia, plantear soluciones a los problemas que se nos presenten, utilizar la creatividad, esta nos permite darle forma a las soluciones propuestas y nos ayuda a diferenciarnos de los demás. La perseverancia es otra facultad que nos permite intentar una y otra vez hasta conseguir lo esperado.
Cuando el autor dice que los ricos no trabajan para el dinero, este hace referencia a que con un conocimiento básico sobre las finanzas y aplicando las herramientas anteriores podemos empezar a ver el dinero como una forma de poder que permite alcanzar ciertas metas en la vida.
Las personas de clase media y baja trabajan solo por el dinero, se vuelven esclavos de si mismos e ingresan a un círculo vicioso del cuál es muy difícil escapar, “la carrera de las ratas”. Una vez que ingresan a dicho círculo dejan de pensar y comienzan a guiarse por sus emociones, el miedo y la ansiedad, no les permite pensar y percatarse de la verdadera situación y de las posibles consecuencias. Para la mayoría las emociones moldean sus pensamientos, lo que este libro propone es utilizar esas emociones para su propio beneficio y darse cuenta del verdadero significado de las mismas.
Hacer que el dinero trabaje para uno en vez de uno trabajar para el dinero, es una de las ideas clave de los primeros cuatro capítulos, esto nos permitirá llevar nuestras finanzas en vez que de las finanzas nos arrastren. No caer en la tentación del crédito, aunque es necesario saber que es una herramienta útil en algunos casos. Pensar-sentir-actuar sobre nuestras posibles soluciones nos proporcionará más rango de influencia sobre nuestras decisiones.
La especialización financiera consiste en alimentar nuestros activos en vez de los pasivos. Pensar en las inversiones como generadores de ingreso a largo o a corto plazo y ver las obligaciones como desvíos de nuestros ingresos fuera de nuestro alcance. Tener una columna mayor de activos es una herramienta clave para poseer un futuro financiero estable.
Ocuparse de su propio negocio y darse cuenta de las características del mismo nos permite conocer nuestras ventajas competitivas, y este es el primer paso para ver el dinero como consecuencia del dinero. Según el autor cada persona se debe hacer cargo de su propio negocio y ser parte o empleado de algún otro. La idea es que es necesario empezar a contar con inversiones en nuestra cartera, porque es de ahí donde de donde nace la verdadera riqueza. La riqueza se mide haciendo el ejemplo de dejar de trabajar hoy ver cual es el lapso de tiempo que pasará para tener la necesidad de empezar a trabajar de nuevo para satisfacer las obligaciones.
Los impuestos nacieron para hacer que haya una distribución más equitativa del dinero, pero a lo largo del tiempo, término afectando más a los pobres que a los ricos. Los capitalistas dotados con conocimientos en leyes tributarias crean las corporaciones, con ellas logran minimizar la cantidad de dinero a pagar al gobierno. No basta con tener dinero hay que tener inteligencia financiera, esta está compuesta por cuatro amplias áreas: contabilidad, inversiones, compresión de los mercados y leyes, solo con esto se logrará conservar y multiplicar las riquezas. Existen cinco obstáculos por los cuales la gente no logra tener grandes ingresos: el miedo a perder dinero, superar el cinismo, la pereza , los malos hábitos y la arrogancia al superar estos obstáculos, se debe evaluar lo que funciona, buscar nuevas ideas, localizar ideas, organizar y tener una buena comunicación, para lograr un buen negocio. El dinero se debe invertir y utilizar razonablemente para que se puedan dar frutos certeros.
Si quieren "ser ricos" leanlo..